Worldcoin: ¿Avance Revolucionario en la Identidad Digital o Perturbadora Amenaza a la Privacidad?

En el escenario actual, donde las conversaciones giran en torno a superconductores eléctricos y avistamientos de ovnis, emerge con notoriedad Worldcoin. Este proyecto de envergadura internacional ha captado la atención por su impacto y, al mismo tiempo, ha dejado en suspenso numerosos interrogantes.

En esta ocasión, no me sumergiré en un análisis pormenorizado de sus complejidades, ya que para tal fin puedes consultar su whitepaper. En cambio, mi objetivo es aterrizar algunas ideas clave del proyecto, tanto si tienes antecedentes sobre él como si no.

Raíces e Interconexiones

En 2015, nació OpenAI, una empresa co-fundada por las eminencias Elon Musk, Sam Altman y un grupo selecto. Este consorcio es famoso por su creación de ChatGPT, una fuerza dominante en el ámbito de la inteligencia artificial. En 2019, Sam Altman, actuando como CEO de OpenAI, co-fundó Worldcoin, su primera incursión en el universo de las criptomonedas.

¿Qué ha generado tanto revuelo? Worldcoin se propone establecer un registro mundial de individuos (World ID) a través del escaneo de iris. Esto permitiría a las personas verificar su identidad de forma "segura" en línea, previniendo futuras suplantaciones mediante inteligencia artificial. Además, el proyecto ofrece una renta básica universal a través de su token, operando en la red Ethereum con el símbolo $WLD.

La innovación radica en sus "orbes", esferas plateadas utilizadas para escanear el iris de aquellos que deseen formar parte de World ID. Estas esferas, conocidas como "orbes", han captado la participación de más de dos millones de personas alrededor del mundo.

Worldcoin declara su disposición a considerar estos datos biométricos como un recurso valioso. El proyecto ya cuenta con su propia aplicación y token, y sigue capacitando a miles de personas globalmente para llevar a cabo el proceso de escaneo.

No sería sorprendente que Neuralink, otra compañía fundada por Elon Musk, eventualmente colabore en la creación de las redes neuronales que Worldcoin busca implementar (si es que no lo están haciendo ya).

Despliegue Sujeto a Escrutinio

Esto no es solo un espectáculo visual. He presenciado esta escena en numerosas ocasiones en eventos relacionados con criptomonedas aquí en Argentina y, más recientemente, en centros comerciales y calles. Los stands de Worldcoin, antes en busca de personas para el escaneo ocular, ahora ven a la gente formando filas por voluntad propia.

Es un hecho. A Sam Altman le emociona la idea de implantar Worldcoin en naciones con alta inflación, inestabilidad política y desconfianza en las instituciones. Y no solo se ha establecido en tales naciones.

Resulta lógico que aquellos que luchan por llegar a fin de mes estén más dispuestos a ceder sus datos biométricos a cambio de unas monedas en sus billeteras. Esto explica por qué el proyecto se expande en países como Argentina, sabiendo que atraerá un gran número de seguidores.

Este proyecto plantea cuestiones morales, éticas y legales. Si bien existen ciertos vacíos legales en esta área, varios países están tomando medidas para obstaculizar la implementación de Worldcoin en sus territorios, incluyendo Argentina. El proyecto aprovecha las jurisdicciones con sistemas judiciales poco receptivos o lentos en la toma de decisiones.

Para algunos, estas esferas evocan la imagen del Gran Hermano o la puerta de entrada hacia él. Personalmente, me recuerdan a los núcleos del icónico videojuego Portal, que, con su visión futurista del mundo y las relaciones humano-máquina, comparten similitudes con la historia de OpenAI.

El Lado Oscuro del Proyecto

Quiero ser claro en mi enfoque. No estoy profundamente preocupado por la solicitud de datos biométricos para acceder al proyecto, ya que Worldcoin no coacciona a nadie a unirse al World ID. Además, muchos de nosotros ya hemos compartido nuestros datos con agencias gubernamentales, aplicaciones de mensajería, correos electrónicos, bancos y exchanges de criptomonedas durante años.

Lo que realmente me inquieta son tres aspectos:

1. El uso futuro de estos datos biométricos: Dado que Worldcoin deja en claro que explotará estos datos, las decisiones perjudiciales para los usuarios no tendrán una figura responsable. Cada individuo acepta voluntariamente estas condiciones, aunque el escaneador no se lo mencione.
   2. Un enfoque más sofisticado en la política global: Imagina que soy un funcionario inescrupuloso que necesita tu apoyo en mi campaña política y en las elecciones. Al entender tu necesidad económica, te ofrezco un incentivo que para mí es insignificante (el token), pero que te satisface. En este sentido, te recomiendo el informe de 2022 de la revista MIT Technology Review sobre cómo Worldcoin podría estar explotando a esta población objetivo.
   3. El suministro del token: Aunque está definido al principio, el control del suministro de Worldcoin será asumido por su gobernanza. Si el proyecto se compromete a proporcionar una renta básica universal, la cantidad inicial podría quedarse corta, llevando a aumentar constantemente el suministro de WLD. Esto puede resultar en una situación parecida a la impresión infinita de dinero por parte de un gobierno para subsidiar a un número creciente de personas. La dirección que tomará la gobernanza es actualmente desconocida.

Implicaciones Globales y Reflexiones Futuras

La ambición detrás de Worldcoin es innegablemente monumental. Establecer un registro global de identidad respaldado por datos biométricos plantea preguntas profundas sobre la privacidad individual y la seguridad de estos datos. A medida que el proyecto avanza y gana tracción, se cierne una sombra de preocupación sobre la posible explotación o mal uso de la información que millones de personas están compartiendo voluntariamente.

Las implicaciones legales y éticas no solo se limitan a nivel nacional, sino que también tienen un impacto internacional. La comunidad global está dividida entre aquellos que ven a Worldcoin como una solución innovadora para combatir la desigualdad y aportar una renta básica universal, y aquellos que temen que este enfoque pueda dar lugar a una concentración de poder en manos de unas pocas entidades.

El proyecto plantea preguntas filosóficas sobre la verdadera naturaleza de la identidad en el mundo digital. ¿Puede nuestra identidad reducirse a una serie de datos biométricos? ¿Qué implica para la autenticidad y la individualidad? Además, el hecho de que Worldcoin esté siendo ampliamente aceptado en naciones con problemas económicos y políticos crea un terreno fértil para discutir si este enfoque es una bendición o una forma de explotación de la necesidad.

En última instancia, el éxito y la aceptación de Worldcoin podrían sentar un precedente para futuros proyectos similares. Los debates en curso sobre regulación, propiedad de datos y el papel de las tecnologías emergentes en la sociedad continuarán evolucionando a medida que proyectos como este sigan desafiando las normas y la ética establecidas.

A medida que el mundo se adapta a las complejidades de esta nueva era digital, es crucial mantener un diálogo abierto y continuo sobre los beneficios y las preocupaciones que surgen. El impacto potencial de Worldcoin, tanto positivo como negativo, nos recordará la necesidad constante de explorar y cuestionar el impacto de la tecnología en nuestra vida cotidiana y en la sociedad en su conjunto.

Conclusión: Entre la Innovación y la Responsabilidad

Worldcoin ha irrumpido en el escenario global con un enfoque audaz y una visión ambiciosa. Su intento de fusionar identidad digital, datos biométricos y una renta básica universal plantea cuestiones fundamentales sobre la tecnología, la privacidad y la ética en la era digital. A medida que este proyecto continúa su evolución y expande su alcance, es esencial recordar que la innovación y la responsabilidad deben ir de la mano.

El camino hacia una sociedad más equitativa y conectada está forjado por una serie de decisiones trascendentales. Worldcoin nos recuerda que mientras la tecnología puede abrir nuevas puertas, también puede plantear dilemas éticos y legales que requieren una evaluación exhaustiva. La aceptación entusiasta del público en países con desafíos económicos agudos subraya la urgente necesidad de soluciones significativas, pero también suscita preocupaciones sobre posibles abusos.

En última instancia, la relación entre la tecnología, la privacidad y la equidad es una que requiere reflexión continua y debate informado. Proyectos como Worldcoin pueden ser catalizadores para el cambio, pero también nos instan a sopesar las implicaciones a largo plazo. Como sociedad, estamos llamados a mantenernos vigilantes, promoviendo la innovación responsable y asegurándonos de que cada paso hacia adelante se dé con plena conciencia de las implicaciones que conlleva.

La historia de Worldcoin es solo una instantánea en el continuo flujo de innovación tecnológica. A medida que avanzamos hacia un futuro cada vez más conectado, es esencial mantener un equilibrio entre la búsqueda del progreso y la protección de los valores fundamentales que nos definen como seres humanos.